Esta colección de esculturas está inspirada en conceptos y símbolos eternos e innatos en el ser humano como la meditación, la apertura, la inspiración o las eternas preguntas de las que ya conocemos las respuestas. Es una invitación a la reflexión en todos los sentidos, incluso en el aspecto físico al observar las obras se crea esa reflexión o efecto que hacen los espejos cóncavos y convexos que nos distorsionan pero nos dejan ver parte de nuestra realidad alterada. El efecto cromo de los acabados de las esculturas de la nueva colección pretende ayudar a esa reflexión y permitir disfrutar de la suavidad de las formas y la dulzura del mensaje entre líneas.